El Barça ha sondeado a otros jugadores como Coman , cuyo contrato con el Bayern es muy alto, Luis Díaz , al que el Liverpool ha declarado intransferible o incluso al veterano Perisic tras desvincularse del Hajduk de Split.
El casting continúa y la opción de Chiesa puede coger cuerpo ya que se están dando todas las circunstancias favorables . El delantero está apartado de la Juventus por la negativa a renovar su contrato, acaba en junio del 2025, y quedar libre para la próxima temporada. La Juve, en ningún caso, quiere que la jugada le salga redonda al futbolista, quien percibiría una primera de fichaje y podría reforzar un rival directo para la Serie A.
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Aunque hace dos años sufrió una grave lesión de rodilla, el italiano se ha recuperado bien y a sus 26 años tiene mucho recorrido por delante. Es un fijo en la selección italiana, disputó la última Eurocopa en Alemania, y mantiene un muy buen cartel.
El jugador no tiene ninguna prisa para forzar su salida. De quedarse en la Juventus, en enero ya podría firmar libremente por el equipo que deseara . En cambio, la Juve quiere venderlo y su prioridad es que no juegue en otro equipo italiano.
Federico Chiesa celebrando un gol con la Juventus / EFE
Los turineses temen que Chiesa se comprometa con el último campeón, el Inter de Milan, quien podría lanzar una ofensiva las últimas horas de mercado para conseguir al jugador a un precio muy por debajo de entre los 20 y 15 millones que se mueve actualmente. Aún peor sería que Chiesa se quedara y fichara libremente por el Inter en 2025.
El Nápoles de Conte, el Milan o la Roma son otros equipos italianos que están al acecho para un futbolista que sigue siendo una gran estrella del fútbol italiano.
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Más difícil parece su marcha a un equipo inglés después de que el Chelsea, el gran agitador del mercado esté a punto de firmar a Joao Félix y el resto de clubs, como el Manchester United, ya tengan sus plantillas muy perfiladas.
Llegados a este punto, el FC Barcelona puede ser la opción preferida de la Juventus para efectuar el traspaso. No se iría a un rival directo, más allá de la Champions League, y el propio jugador estaría motivado de probar en el fútbol español.
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Los condicionantes parecen favorables para las dos partes, pero el Barça no se precipitará y antes de afrontar un nuevo fichaje debe inscribir a Dani Olmo y dar salida a Lenglet y Vitor Roque.
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